lunes, 16 de junio de 2008

GORDITOS EN REHABILITACION A.C.



Hacerse de una buena panza en estos tiempos no es tan sencillo como parece, se requiere de una considerable inversión de tiempo, dinero y hasta disciplina ¿Por qué no? La onda de los gimnasios definitivamente no es lo mío y sin embargo llevo algunas semanas en uno que a pesar de ser un tanto pintoresco y extravagante me ha sido útil para quemar esa grasa que un día con tanta devoción y gusto gané. Mis primeros días ahí fueron tan extraños como para el guadalupano –de hueso colorado- en una convención de radicales islamitas, es decir; me sentía totalmente fuera de contexto. Busqué esos viejos pants y tenis, pagué la respectiva cuota, me compré unos guantes y a darle; ya estaba ahí. Traía cara de despistado; veía esos enormes aparatos pesados y me preguntaba para qué fregados servían; percibía olores tan asesinos como esos que emanan de un microbús a tope a las 3 p.m. mientras oía esa música entre punchis punchis y regueton bastante mala que lejos de motivarme me apagaba y claro; veía a todos esos tipos rudos (lo de rudos por el cuerpo de luchadores ¡ja!) levantando muchos kilos y sintiéndose bien buenotes o bien, tan malditos como el terminator. Todo lleno de espejos; a donde quiera que voltees te ves reflejado y he notado que en muchos hombres es más su gusto por mirarse que por ejercitar sus pellejos; pura maldita vanidad, me pregunto que tanto se miran y cuantas veces lo hacen; como si por mirarse mucho se pusieran más inflados o esas sus caras “idílicas” del Conde de Chalpatlahua fueran a presentar cierta mejoría –y eso que no soy nada guapo-. Estoy conciente de la función de los espejitos en todos los gyms: una clara alusión al día que nos cayeron los gachupines y nos pusimos re-contentísimos al ver nuestras imágenes reflejadas…chale.

Pero a pesar de todo y ya sin afán de crítica ahí ando, pertenezco al grupo de Gorditos en Rehabilitación A (de Ansiosos) C (de Comedores); de esos panzones tratando de adelgazar la lonja y engordar la voluntad ¡ja! Ha sido buena experiencia, no hay queja; pasa que soy algo observador y esta boca mía no tiene freno y menos, cuando se trata de unos buenos tacos de costilla con una chela bien fría…pura vida.

P.D. Un agradecimiento especial a mi brother el Chucho ya que sin su empuje no más no le hubiera entrado a esto de los tríceps, cuadriceps y cuadricrispis

No hay comentarios: